Pasaron 3 años sin retomar el Blog...
3 años fascinantes, que culminan con una tremenda decisión familiar: nos vinimos a vivir al SUR del Mundo!!
Es el primer día en la Capital de la Región de Aysen, y por está vía iré relatando de a poco las experiencias de esta nueva aventura, y para partir comparto el mensaje que les hice llegar a varias personas a propósito de estas "especiales" fiestas de fin de año para los Sandoval Méndez
"35 años acumularon la valentía y la energía necesaria...
Estoy a punto de iniciar un viaje al sur, el que conocí hace casi 25 años, el que me terminó de enamorar en un ya lejano inicio de siglo… Ahora es en familia, y nos vamos al sur ¡Bien al sur!
Por eso, estas fiestas de fin de año tienen un sabor especial, en lo personal y familiar, estamos a las puertas de hacer realidad un sueño varias veces relegado y que implica un rotundo cambio en lo que nos venía pasando.
Siempre aprovecho estas fechas para agradecer, pero esta vez el agradecimiento viene acompañado de muchas emociones, recuerdos y anhelos, las lágrimas están listas para salir en cualquier momento y las ganas de abrazar van en aumento. Por eso me senté a escribir estas líneas, no quiero olvidar esta emoción y quiero guardar el vivo recuerdo de cómo se están dando todos estos días antes del gran viaje.
La valentía necesaria para decir “nos vamos”, tiene varias fuentes, pero fundamentalmente es gracias a la mirada de Constanza, que no ha podido ser mejor compañera en este tren llamado vida, tren que por más de 11 años hemos compartido, no sin dificultades, y con voluntad y amor hemos logrado crecer, aprender y mejorar juntos. Otra inagotable fuente de valentía, energía y amor es Florencia, “la flor más linda” que no para de sorprenderme y que día a día me enseña a ser “Padre” y me entrega un amor incondicional... Sé que no es la más feliz por el nuevo destino, pero confío que el crecer juntos en un ambiente distinto al que nos ofrece el querido Santiago, será una oportunidad que valorará y que la hará mucho mejor persona de lo enorme que ya es.
Mis padres, ambos, alimentaron también la decisión que tomamos. Me permitieron construir la persona que hoy soy, me dejaron equivocarme y me acompañaron (en la manera que cada uno sabía) en las alegrías y dolores de la vida. Sé que están felices porque cumplo un sueño, y que su amor los hace disminuir la nostalgia por la considerable distancia física que se abrirá entre nosotros.
La Mané (así con tílde), la Javi y el Benja (que a lo mejor no lo saben y es porque no se los he dicho) son de lo más lindo que me ha dado la vida, porque con ellos aprendí a conocerme y a relacionarme con otros, y bien tarde en este viaje, he descubierto el enorme amor que les tengo y que me había costado entregarles (todavía estoy aprendiendo eso). “Sin querer queriendo”, mis hermanos también son fundamentales en mis ganas de querer cumplir mis sueños… Chiquillos: ¡gracias por eso!
La familia es grande, y va creciendo con los años, pero no por ello no reconozco en mis tíos (Lucho, Yeyo, Lucho, Sole, Hildi, Moni, Maru, Harold) y primos (que son hartos y que algunos ya me han dado sobrinos) el aporte y cariño que durante estos 35 años he necesitado. Sólo como ejemplo, destaco la valentía demostrada por el Pipe y su familia, el amor y entrega incondicional de la Quiquica, la compañía en mi infancia de Luchito y el talento de los Matus (que desde niño admiré en ellos y que hoy Florencia está aprendiendo). Sumo al pequeño Martín que ha llegado a llenar de amor y risas la casa de Raimundo Charlin… No los nombro a todos, porque insisto: ¡son caleta! Sumo como parte de mi familia, a la familia de la Cony, quienes han sido fundamentales para construir la familia que hoy somos.
A los amigos y amigas que la vida puso en mi camino, unos siguen o aparecen de repente, otros ya no están, pero todos y todas han marcado a fuego el que soy hoy por hoy. A los de la Academia de Humanidades, con los que compartí en la sala o fuera de ella (por supuesto a los TRELSC); a los de Veterinaria, que a lo mejor por mis fases personales, son los que más siguen y con los que he podido aprender a quererlos sin temor y sinceramente; los de la otra Academia, la “LocAdemia”, menos en cantidad pero no en importancia; los de la SEXTA, que pasamos 6 años hermosos; los que me ha regalado el sur, los ENACTIVOS y ENACTIVAS que no queremos nunca de dejar de soñar en Puelo; y a todos los que la vida ha puesto por diferentes motivos en mi vida: Gracias de verdad!!
Quiero mencionar especialmente a los que han alentado (sin quererlo a lo mejor) el que hayamos tomado la decisión: Juan Pablo y Álvaro allá en Coyhaique, y a Nadia, Nancy y Humberto, que con su ejemplo nos “dijeron” en las pasadas vacaciones: “que es cosa de hacerlo, que se puede”.
Las experiencias vividas desde chico, de las que me acuerdo y las que quedaron en el inconsciente (parece que esas son más), también hicieron lo suyo. Por algo pasan las cosas, y todo lo vivido y lo aprendido ha llegado en el momento indicado y preciso, como hasta ahora último el Yoga, la búsqueda espiritual y el querer aprender cosas que en el colegio sólo pasaron (como la historia de Chile). No puedo omitir el trabajo, tengo la suerte de decir que donde he trabajado he aprendido mucho, y que logré trabajar por casi 6 años en lo que imaginé hacer cuando decidí cambiarme a Administración Pública y llegué a un lugar donde me entregaron la confianza y el apoyo necesario para crecer personal y profesionalmente. A quienes pasaron por mi lado en todas las diferentes pegas que he tenido (recordando con especial cariño Crearte, el INP (así como antes) y obviamente el Centro IDEACTIVA y la Muni), les agradezco la oportunidad de conocernos y trabajar juntos, y les pido disculpas si no hice todo lo posible o lo que esperaban de mí.
Estas líneas las escribí para ustedes. Todos han sido mis profesores y maestros de este viaje, y han permitido que 35 años después, tuviera la valentía y la energía necesaria para seguir buscando y construyendo el camino hacia la vida que quiero vivir…
Estas líneas las escribí para mí. Porque no puedo negar la pena, ansiedad y temor que este nuevo rumbo me genera. Sentimientos que no logran opacar la enorme felicidad que tengo al sentir que estoy avanzando conscientemente hacia alcanzar mis sueños y acompañado de 2 mujeres maravillosas… Como dice la firma de mis correos hace ya varios años, hago todo el esfuerzo necesario por “ser el cambio que quiero ver en el mundo”
Felices fiestas… Y de nuevo, ¡GRACIAS!"
Estoy a punto de iniciar un viaje al sur, el que conocí hace casi 25 años, el que me terminó de enamorar en un ya lejano inicio de siglo… Ahora es en familia, y nos vamos al sur ¡Bien al sur!
Por eso, estas fiestas de fin de año tienen un sabor especial, en lo personal y familiar, estamos a las puertas de hacer realidad un sueño varias veces relegado y que implica un rotundo cambio en lo que nos venía pasando.
Siempre aprovecho estas fechas para agradecer, pero esta vez el agradecimiento viene acompañado de muchas emociones, recuerdos y anhelos, las lágrimas están listas para salir en cualquier momento y las ganas de abrazar van en aumento. Por eso me senté a escribir estas líneas, no quiero olvidar esta emoción y quiero guardar el vivo recuerdo de cómo se están dando todos estos días antes del gran viaje.
La valentía necesaria para decir “nos vamos”, tiene varias fuentes, pero fundamentalmente es gracias a la mirada de Constanza, que no ha podido ser mejor compañera en este tren llamado vida, tren que por más de 11 años hemos compartido, no sin dificultades, y con voluntad y amor hemos logrado crecer, aprender y mejorar juntos. Otra inagotable fuente de valentía, energía y amor es Florencia, “la flor más linda” que no para de sorprenderme y que día a día me enseña a ser “Padre” y me entrega un amor incondicional... Sé que no es la más feliz por el nuevo destino, pero confío que el crecer juntos en un ambiente distinto al que nos ofrece el querido Santiago, será una oportunidad que valorará y que la hará mucho mejor persona de lo enorme que ya es.
Mis padres, ambos, alimentaron también la decisión que tomamos. Me permitieron construir la persona que hoy soy, me dejaron equivocarme y me acompañaron (en la manera que cada uno sabía) en las alegrías y dolores de la vida. Sé que están felices porque cumplo un sueño, y que su amor los hace disminuir la nostalgia por la considerable distancia física que se abrirá entre nosotros.
La Mané (así con tílde), la Javi y el Benja (que a lo mejor no lo saben y es porque no se los he dicho) son de lo más lindo que me ha dado la vida, porque con ellos aprendí a conocerme y a relacionarme con otros, y bien tarde en este viaje, he descubierto el enorme amor que les tengo y que me había costado entregarles (todavía estoy aprendiendo eso). “Sin querer queriendo”, mis hermanos también son fundamentales en mis ganas de querer cumplir mis sueños… Chiquillos: ¡gracias por eso!
La familia es grande, y va creciendo con los años, pero no por ello no reconozco en mis tíos (Lucho, Yeyo, Lucho, Sole, Hildi, Moni, Maru, Harold) y primos (que son hartos y que algunos ya me han dado sobrinos) el aporte y cariño que durante estos 35 años he necesitado. Sólo como ejemplo, destaco la valentía demostrada por el Pipe y su familia, el amor y entrega incondicional de la Quiquica, la compañía en mi infancia de Luchito y el talento de los Matus (que desde niño admiré en ellos y que hoy Florencia está aprendiendo). Sumo al pequeño Martín que ha llegado a llenar de amor y risas la casa de Raimundo Charlin… No los nombro a todos, porque insisto: ¡son caleta! Sumo como parte de mi familia, a la familia de la Cony, quienes han sido fundamentales para construir la familia que hoy somos.
A los amigos y amigas que la vida puso en mi camino, unos siguen o aparecen de repente, otros ya no están, pero todos y todas han marcado a fuego el que soy hoy por hoy. A los de la Academia de Humanidades, con los que compartí en la sala o fuera de ella (por supuesto a los TRELSC); a los de Veterinaria, que a lo mejor por mis fases personales, son los que más siguen y con los que he podido aprender a quererlos sin temor y sinceramente; los de la otra Academia, la “LocAdemia”, menos en cantidad pero no en importancia; los de la SEXTA, que pasamos 6 años hermosos; los que me ha regalado el sur, los ENACTIVOS y ENACTIVAS que no queremos nunca de dejar de soñar en Puelo; y a todos los que la vida ha puesto por diferentes motivos en mi vida: Gracias de verdad!!
Quiero mencionar especialmente a los que han alentado (sin quererlo a lo mejor) el que hayamos tomado la decisión: Juan Pablo y Álvaro allá en Coyhaique, y a Nadia, Nancy y Humberto, que con su ejemplo nos “dijeron” en las pasadas vacaciones: “que es cosa de hacerlo, que se puede”.
Las experiencias vividas desde chico, de las que me acuerdo y las que quedaron en el inconsciente (parece que esas son más), también hicieron lo suyo. Por algo pasan las cosas, y todo lo vivido y lo aprendido ha llegado en el momento indicado y preciso, como hasta ahora último el Yoga, la búsqueda espiritual y el querer aprender cosas que en el colegio sólo pasaron (como la historia de Chile). No puedo omitir el trabajo, tengo la suerte de decir que donde he trabajado he aprendido mucho, y que logré trabajar por casi 6 años en lo que imaginé hacer cuando decidí cambiarme a Administración Pública y llegué a un lugar donde me entregaron la confianza y el apoyo necesario para crecer personal y profesionalmente. A quienes pasaron por mi lado en todas las diferentes pegas que he tenido (recordando con especial cariño Crearte, el INP (así como antes) y obviamente el Centro IDEACTIVA y la Muni), les agradezco la oportunidad de conocernos y trabajar juntos, y les pido disculpas si no hice todo lo posible o lo que esperaban de mí.
Estas líneas las escribí para ustedes. Todos han sido mis profesores y maestros de este viaje, y han permitido que 35 años después, tuviera la valentía y la energía necesaria para seguir buscando y construyendo el camino hacia la vida que quiero vivir…
Estas líneas las escribí para mí. Porque no puedo negar la pena, ansiedad y temor que este nuevo rumbo me genera. Sentimientos que no logran opacar la enorme felicidad que tengo al sentir que estoy avanzando conscientemente hacia alcanzar mis sueños y acompañado de 2 mujeres maravillosas… Como dice la firma de mis correos hace ya varios años, hago todo el esfuerzo necesario por “ser el cambio que quiero ver en el mundo”
Felices fiestas… Y de nuevo, ¡GRACIAS!"
MANU(el Andres) SANDOVAL (Baros) ...."Deja la Vida Volar"....
No hay comentarios.:
Publicar un comentario