Silencio

Nieve
Despierto un sábado de junio temprano, la vista desde la ventana mostraba un manto blanco que cubría todo... Pero, TODO. Bajo, abro la puerta y varios centímetros de nieve acumulados en la entrada no me dejan salir. No entiendo mucho, con pijama y sin zapatos, me quedo mirando el hermoso espectáculo, en mi quinto mes en La Patagonia, tenía mi primer encuentro cercano con la nieve... A mi al rededor: SILENCIO

Un poco de sol
Camino a casa después del trabajo, ya todos se han ido, es viernes y salimos antes, entonces tenemos una hora más de luz en la tarde para aprovechar los pequeños rayos de sol que se filtran entre las nubes, que durante el día han dejado agua a ratos y ya nos han regalado varios arcoíris. Recorrer los al rededores del pueblo, salir a pedalear, tomar un mate o unas cervezas mirando por la ventana, lo que sea para aprovechar la luz del sol al despedir el día y la semana laboral. Ya con seis meses en el sur, se agradece el sol... Miro a todos lados y me atrapa el SILENCIO.


Soledad
Entro a una pequeña casa, bien abrigada por el fuego que se mantiene siempre prendido en una cocina a leña bien a maltraer. Leña acumulada en diferentes lados, mezclándose con platos, bolsas de hierba y ropa. Un arrugado rosto al fondo, mirando todo a su al rededor, aislado del mundo por los años que le van quitando la vista y el oído. Recuerdos de historias de muchos años atrás, me habla sobre familiares que ya no vienen a este rincón del mundo a verlo y lo veo envuelto en lo que ya parece ser su uniforme, una manchada pero abrigadora parca, trato de seguir sus recuerdos, pero en mi interior me imagino a mi, varios años más adelante, y dudo tener la capacidad de este añoso hombre golpeado por la vida en la Patagonia y poder resistir en esa categórica soledad el paso de invierno tras invierno.... Busco respuestas en mi mente y no encuentro más que SILENCIO.

Asados
Juntarse entre los afuerinos, y ojala con con algunos locales, es la receta ideal y parece que todos buscan seguirla al pie de la letra. Conversar de todo, pero hay que esforzarse para buscar temas nuevos y que salgamos de estas veintitantas manzanas que son el Pueblo que hoy nos recibe. Algo para aliviar la garganta de la conversa y de las risas, todos con sus preferencias, la cerveza y el vino son mi elección (¿serán los años?) y por su puesto comida... En la Patagonia, eso es sinónimo de carne... Diferentes cortes, especies animales, preparaciones, acompañamientos y modos de servirla, pero Carne...Carne.. y más Carne.... Me doy cuenta que por un rato, solo por un rato, me escape del SILENCIO.

En resumen, me estoy acostumbrando al silencio y a la falta de ruido.... Hace bien, ha sido otro aprendizaje en mis ya casi 7 meses por estas latitudes.

"DEJA LA VIDA VOLAR" Debes ser el Cambio que Quieres ver en el Mundo